El storydoing se ha hecho un hueco en el sector de la publicidad y crece cada día. A diferencia del storytelling publicitario, storydoing ofrece experiencias a los usuarios, que les hagan sentirse identificados con los valores de la marca. Actualmente, su puesta en práctica puede reportar resultados muy positivos en estrategias de marketing y publicidad.
¿Qué es el Storydoing?
En la actualidad, el storydoing se está posicionando como una de las estrategias más eficientes para campañas de publicidad. El storydoing va más allá de las palabras y pasa a la acción, tratando de crear y ofrecer experiencias a sus usuarios.
Es decir, en vez de contarle al usuario en qué consiste la experiencia, el storydoing intenta que el usuario forme para de la experiencia empleando distintas herramientas, con un claro objetivo: hacer que el usuario sea el protagonista. Estas experiencias, siempre, deben cumplir con los valores de la marca para que el usuario sea consciente de cuáles son y por qué diferencian a la empresa del resto.
Diferencias entre el Storytelling y el Storydoing
Al hablar de storydoing, es común que se asocie con el storytelling. Sin embargo, existen diferencias que hacen que sean estrategias distintas con objetivos distintos. En primer lugar, el storytelling se basa en un discurso comunicativo que intenta llegar al usuario mediante mensajes que apelen a los sentimientos y que representen los valores de la marca. Mientras tanto, el storydoing, traslada a la acción los valores de marca, haciendo partícipe al usuario.
Además, como se ha explicado, otra de las diferencias claras es la materialización de la marca, es decir, materializar los valores para que el usuario pueda formar parte de ello. Sin embargo, el storytelling en publicidad busca apelar a los sentimientos del usuario, pudiendo conseguir que pueda sentirse identificado con la marca.
Por último, se podría decir que tanto el storydoing como el storytelling forman parte de un plan de publicidad, sin embargo, los objetivos son diferentes, pero no excluyentes. Es decir, ambas estrategias pueden ser combinables y complementarias.
¿Cuáles son las ventajas del storydoing?
El storydoing está suponiendo una revolución en el ámbito del marketing y la publicidad, y se está postulando como una de las estrategias más viables para el marketing de contenidos. Las ventajas que presenta el storydoing son muy numerosas y pueden suponer muchos beneficios para las marcas a todos los niveles.
En primer lugar, hace al usuario protagonista, dándole la oportunidad de vivir una experiencia real, lo que podrá ofrecerle un conocimiento más amplio y personalizado de la marca. De esta forma, el “boca a boca” será más sencillo, ya que el usuario podrá compartir una experiencia real.
Además, el storydoing fomentará la reputación de marca y diferenciará a la marca de la competencia, ya que al hacer al usuario protagonista, aumentará la credibilidad. Esta estrategia, además, da la oportunidad a la marca de tener un feedback directo con el consumidor, lo que puede ser positivo para tener en cuenta aquellos aspectos que se puedan mejorar o reforzar.
¿Se puede usar storytelling y storydoing en una misma marca?
Como se ha explicado, al contrario de lo que suele creerse, el storytelling y el storydoing son complementarios y pueden ser utilizados de forma simultánea. Puede ser muy positivo, ya que se puede contar una historia al usuario, mediante el storytelling, y hacer al usuario partícipe o protagonista de dicha historia mediante el storydoing.
Sin embargo, es importante utilizar estas estrategias de forma controlada y moderada para evitar un exceso de información e interacción que pueda saturar al usuario y empañar su experiencia con la marca. No obstante, estas estrategias son positivas ya que proporcionan encuentros reales y tangibles entre la marca y el consumidor, aportando más cercanía y confianza con el usuario.
Las mejores campañas de Storydoing
Existen grandes marcas muy populares que ya han puesto en marcha sus estrategias de storydoing, por ejemplo, Coca-Cola, marca caracterizada por mensajes potentes que logran conmover y apelar a los sentimientos de sus clientes y usuarios. En este caso, instaló una máquina expendedora que bautizó como “máquina de la amistad” de Coca-Cola. Ésta ofrecía un 2×1 y contaba con grandes dimensiones, lo que hacía necesario la participación de dos personas, de esta forma, se promovió la importancia de la amistad e hizo a los usuarios conscientes de que con un amigo todo es más fácil y divertido.
La mítica marca de bolígrafos BIC, para celebrar su 60 cumpleaños, creó una tienda física, en la que entregaba a sus clientes billetes de diferente valor en blanco. De esta forma, empleando bolígrafos de la marca, los usuarios debían explotar su creatividad y dibujar en los billetes para que tuviesen validez.
La empresa de maderas Finsa, llevó a cabo una estrategia de storydoing, en la que, mediante una amplia exposición hizo un recorrido por el proceso de transformación de la madera, en la que ofrecía sabores, texturas y olores a los usuarios. De esta forma les hizo partícipes de todo el proceso.
Por último, la estrategia de storydoing de Red Bull tampoco ha dejado a nadie indiferente. Esta marca siempre ha mostrado su apoyo a los deportes de aventura, lo que se ha convertido en parte de su reputación como marca. De esta forma, vinculó su marca a un hecho histórico que retransmitió a nivel mundial: el primer salto desde la estratosfera, llevado a cabo por el paracaidista Felix Baumgartner y conocido como “Red Bull Stratos”.
El storydoing ha cambiado la manera de hacer publicidad, ya que las marcas buscan un acercamiento con el consumidor, cambiando la imagen que éstos tenían de ella. El storydoing se encuentra en auge y seguirá creciendo y ofreciendo experiencias únicas a los usuarios.